DERECHO DE RÉPLICA; NO PASARÁ NADA.

Viernes Contemporáneo

Armando Ortiz

Derecho de réplica de Carlos Ahumada;
no pasará nada.

Derecho de réplica de Carlos Ahumada llega en un momento en que ya nada tiene remedio. En este libro, en el que el empresario argentino contesta a las preguntas de varios periodistas, pone al descubierto, o mejor dicho, sólo corrobora lo que muchos de nosotros ya sabíamos: El Sistema organizó un complot en contra de Andrés Manuel López Obrador para evitar que éste llegara a la presidencia de la república. En su momento fue motivo de risa, de escarnio por parte de muchos periodistas quienes afirmaban que López Obrador era un obseso. Otros comunicadores no bajaban de hablador a Andrés Manuel, tipos como Eduardo Ruiz Healy lo llamaba un “mentiroso profesional” y no perdían oportunidad para atacarlo fieramente. El mismo Joaquín López Dóriga, quien de acuerdo con las declaraciones de Ahumada, estaba muy al tanto de las maquinaciones de los conspiradores, nunca dio crédito al tabasqueño tirándolo siempre de paranoico, con un marcado delirio de persecución. Ya ni hablar de la perrada, de la jauría de “textoservidores”, diestros en hacer “texto oral” que se lanzaron con todo: Pedro Ferriz de Con, Ciro Gómez Leyva, Carlos Ramos Padilla, Oscar Mario Beteta, sólo por mencionar a los peores. Pero el titular del noticiero más visto de la televisión mexicana, López Dóriga, no puso reparos éticos ni morales en colaborar, prestándose a una entrevista simulada con Ahumada desde Cuba.

En sus declaraciones Ahumada pasa a traer a mucha gente que se benefició de ese complot. Habla de Bernardo Gómez, alto ejecutivo de Televisa, habla de Diego Fernández de Cevallos, quien antes que desmentirlo cínicamente declara que todo “lo volvería a hacer”. El argentino incluye en varias páginas de su libro a su otrora amante Rosario Robles, de quien dice estaba presente en las negociaciones. Revela además que Carlos Salinas de Gortari mandaba a gobernadores y senadores para que estos movieran sus hilos y pudieran pagar cantidades convenidas como fuel caso de los entonces gobernadores Manuel Andrade y Arturo Montiel. No baja de gato a Diego Fernández de Cevallos, quien se doblegaba sin reparos a su voluntad.

Formaron parte del complot, según Ahumada, el mismo Vicente Fox, Santiago Creel, el finado Ramón Martín Huerta, Rafael Macedo de la Concha y Eduardo Medina Mora, todos ellos secretarios de estado, miembros del gabinete de Vicente Fox. Eso y más, es lo que declara Carlos Ahumada en el adelanto que nos brinda del libro que pronto se agotará en las librerías y que requerirá de más ediciones.

Pero una vez enterados de todo, nada pasará, porque en este país nada pasa. Los mexicanos somos tan pusilánimes que no pedimos cuentas a nuestros gobernantes, no exigimos justicia y por eso la impunidad es una moneda común con la que se pagan favores y se omiten delitos. No pasará nada porque los que nos gobiernan ahora agradecen que se haya llevado a cabo ese complot antes, pues gracias a éste y a un fraude electoral ellos están en el poder. No pasará nada porque lo que importa en este país son los grandes intereses y esos se salvaron antes que los intereses de toda la población.

No pasará nada como no pasó nada cuando se descubrió que los hijos de Marta Sahagún se enriquecieron con el tráfico de influencias; no pasará nada como no le pasó nada a Fox al descubrirse sus manejos turbios y sucios de la cuenta pública; no pasará nada como no le pasó nada al “gober precioso”; No pasara nada como no pasó nada cuando se escapó el Chapo el Guzmán de Puente Grande.

No pasará nada porque lo que debía pasar sólo le pasa a gente como los de San Miguel Atenco, a quienes sí se les sentencia a cientos y cientos de años de prisión. No pasará nada porque lo que habría de pasar ya le esta sucediendo a millones de mexicanos que se quedaron sin empleo, sin casa, sin sustento. No pasará nada porque los implicados tienen más poder que nosotros, porque nos han vendido la idea de que nosotros somos los que podemos, pero ellos son lo que ejecutan. No pasará nada porque estamos muy preocupados por la influenza; no pasará nada porque apenas nos da tiempo de ver nuestra telenovela; no pasará nada porque estamos muy entretenidos en nuestro fútbol; no pasará nada porque ahora al que no le vana creer es a Carlos Ahumada. No pasará nada porque este es el país del no pasa nada.



Armando Ortiz aortiz52@hotmail.com