5 nov 2008


Se desploma la aeronave que lo conducía de SLP al DF


Muere Mouriño


José Luis Santiago Vasconcelos y seis personas más, entre las víctimas




La nave Learjet en la que viajaban el secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño, y el ex director de la SIEDO, José Luis Santiago Vasconcelos, cayó alrededor de las 18:40 horas en la calle Ferrocarril de Cuernavaca, en Lomas de Chapultepec, a unas cuadras de la Fuente de Petróleos. Según testimonios, el primer impacto ocasionó un gran estallido que cimbró la zona e incendió más de 20 vehículos. Las autoridades reportaron 40 personas lesionadas, algunas de gravedad. El Ejército y la PFP acordonaron el espacio del siniestro, que quedó sin electricidad por la destrucción de postes y cableado Foto Notimex



La aeronave en que retornaban al DF procedentes de SLP se desplomó en Lomas de Chapultepec

Mueren Mouriño, Santiago Vasconcelos y seis personas más en accidente aéreo


Perecen los funcionarios de la SG Miguel Monterrubio, Arcadio Echeverría y Norma Angélica Díaz, así como los pilotos Julio César Ramírez, Álvaro Sánchez y la sobrecargo Giselle Carrillo

Mirna Servín, Agustín Salgado y Alejandro Cruz

El secretario de Gobernación, Juan Camilo Mouriño Terrazo, y el ex titular de la Subprocuraduría de Investigación Especializada en Delincuencia Organizada, José Luis Santiago Vasconcelos, murieron ayer al caer la aeronave en la que viajaban a la ciudad de México procedentes de San Luis Potosí.

En el accidente también perdieron la vida Miguel Monterrubio, director general de Comunicación Social de la Secretaría de Gobernación; Arcadio Echeverría Lanz, coordinador de Eventos y Administración de la oficina del secretario; Norma Angélica Díaz, directora de área en la Dirección de Comunicación Social de la SG; Julio César Ramírez Dávalos, piloto aviador; Álvaro Sánchez Jiménez, copiloto, y la sobrecargo Giselle Carrillo.

El percance ocurrió alrededor de las 18:40 horas en la calle de Ferrocarril de Cuernavaca, colonia Lomas de Chapultepec, a tan sólo unas cuadras de la Fuente de Petróleos. Las autoridades capitalinas y federales que llegaron al lugar confirmaron que los cinco pasajeros, los dos tripulantes y la sobrecargo de la aeronave de la Secretaría de Gobernación, tipo Learjet, matrícula XC-VMC, murieron en el lugar del accidente.

La explosión del jet y de algunos automóviles alcanzados por las llamas dejó un saldo oficial de 40 personas lesionadas, algunas de gravedad, debido a las múltiples quemaduras que sufrieron. De acuerdo con los primeros testimonios de vecinos y empleados, el primer impacto ocasionó un gran estruendo que cimbró el piso y los automóviles que en ese momento circulaban en las calles aledañas.

Inmediatamente después vino una explosión que iluminó todo. A esta primera llamarada, que alcanzó varios metros de altura, le siguieron varias explosiones de los vehículos que se encontraban más cerca del punto de impacto de la aeronave.

El fuego alcanzó a más de 20 autos que quedaron completamente calcinados en el lugar. El daño se propagó a varios edificios corporativos que alojaban empresas de computación, financieras, de seguros y bancarias, cuyo personal fue desalojado alrededor de las 19 horas.

Los primeros pisos de los edificios más cercanos a donde ocurrió la explosión quedaron cubiertos por ceniza negra y por lo menos dos inmuebles presentaban daños en parte de su estructura.

Al filo de las 20 horas, acudió el jefe de Gobierno, Marcelo Ebrard Casaubon, acompañado por el secretario de Seguridad Pública del Distrito Federal, Manuel Mondragón y Kalb, para coordinar y supervisar los trabajos de rescate y resguardo del perímetro afectado.

Asimismo, llegaron Luis Téllez, secretario de Comunicaciones y Transportes, y Max Cortázar, vocero de la Presidencia.


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La encabeza el Ejecutivo en Los Pinos


Reunión urgente del gabinete de seguridad

Incredulidad en Bucareli: ‘‘el jet era casi nuevo’’, dicen


Se perdió comunicación minutos antes de entrar a la capital: Luis Téllez


Exigen en el Senado realizar pesquisas que despejen cualquier duda






Las primeras versiones del accidente rompieron la calma en la SG

“¡El secretario no me contesta el celular!”

Fabiola Martínez

El sosiego en Bucareli se rompió de tajo minutos después de las siete de la noche, cuando los primeros reportes señalaban que el avión que se desplomó en Periférico y Paseo de la Reforma procedía de San Luis Potosí. “El secretario Mouriño viene en ese vuelo, ¡pero nadie me contesta el celular!”, repetía angustiada una funcionaria de la dependencia.

Los rostros de incredulidad se reflejaban en empleados que entraban y salían. Incredulidad porque el jet accidentado era “prácticamente nuevo”, comprado durante la gestión de Santiago Creel, de ahí que el récord de horas de vuelo era de no más de cuatro años.

Fuentes consultadas confirmaron que el Lear Jet 45 tenía una capacidad de vuelo de hasta cinco horas y que le tocó prácticamente estrenarlo al ex secretario Carlos Abascal, quien incluso en dos ocasiones viajó en él a Washington. “Era una aeronave preciosa. Nunca hubo averías. Siempre se voló muy bien, eran escrupulosas las revisiones”, comentaron las fuentes.

Mientras las versiones circulaban, incluso aquella que se refería a que Abascal había cancelado un vuelo por supuestas fallas, llegó a la en ese momento solitaria dependencia la familia de Miguel Monterrubio, director general de comunicación social. La esposa y los dos hijos pequeños del vocero buscaban que alguien les diera información fidedigna.

Enseguida llegaron, también con rostros desencajados, dos de los más cercanos colaboradores de Mouriño: el mexiquense Ulises Ramírez, coordinador de asesores del secretario, y Cuauhtémoc Cardona, subsecretario de Enlace Legislativo. Ninguno quiso hacer declaraciones ni confirmar lo que a esa hora posiblemente ya sabían.

Minutos después llegó a Gobernación el senador potosino Alejandro Zapata Perogordo, a quien se había mencionado, en los primeros reportes extraoficiales, como uno de los ocho pasajeros del vuelo. Para esa hora, cerca de las ocho de la noche, el legislador declaró que venía a mostrar su solidaridad por la pérdida de su “muy amigo”.


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