Empieza la represión contra AMLO

Por Federico Arreola
08 de Enero, 2009 - 10:28

Resulta increíble que hayan sido detenidas algunas de las personas que suelen acompañar, desde hace años, a Andrés Manuel López Obrador en sus giras.

¿Increíble? En realidad, se habían tardado. Para dar la apariencia de que vivimos en democracia, el gobierno federal (el más autoritario que se recuerde) había permitido que Andrés Manuel recorriera el país sin apenas ser molestado. No hacía falta, pensaban en el gobierno. Como le habían cerrado al tabasqueño prácticamente todos los medios de comunicación, se esperaba en la administración de Calderón que el mensaje del líder de la resistencia civil no llegara a los mexicanos.

Se equivocaron. En el gobierno entendieron que habían hecho un muy mal cálculo cuando realizaron sus últimas encuestas. Porque el mensaje de López Obrador no sólo ha llegado a la gente, sino que, algo todavía peor para los que usurparon el poder, ha crecido notablemente la popularidad de Andrés Manuel.

En el gobierno saben que, si hoy fueran las elecciones presidenciales, AMLO ganaría. Sin lugar a dudas, de calle, contundentemente. Por eso, el gobierno panista ha empezado a endurecerse. Por eso, fueron detenidos en Sinaloa, ilegalmente, algunos colaboradores de López Obrador. Se les privó de la libertad, en un retén, a pesar de que tenían todos sus documentos en regla.

Se detuvo por igual a algunos policías que prestan sus servicios en el gobierno legítimo que a civiles que realizan actividades de prensa. Sin justificación, sin bases legales. Simplemente se les aprehendió porque se dirigían, por carretera, a un mitin de Andrés Manuel López Obrador.

Nada más que por eso. Miserables.

Ni caso tiene preguntar si el nuestro es un país de libertad. No lo es, desde luego. Y no es de ninguna manera sencillo luchar por la democracia en estas condiciones. Pero, lo dijo Camus en uno de sus artículos, si bien la lucha es difícil, las razones para luchar siguen siendo claras.